hay un cuento olvidado
escondido debajo de mi almohada

silencio

deja que ladren los perros

supongo que sigue lo inesperado, ese delgado hilo que no entiendo pero que me invita ahorcar los recuerdos, durante mucho tiempo mi pecho fue grande, cabía agua y arena. Tengo huecos que no voy a llenar nunca y estoy siendo muy pesimista. Ojalá pudiera ver en mis manos tu camino, sin que tú lo supieras. Estoy en el borde de todos los sueños, de mi cama. Cierro los ojos y veo esa puerta, la sala, los perros, la vecina. También veo olas y me gusta imaginarme que nado. Que tonto he sido ultimamente, me he llenado la boca de tierra, me he quitado los ojos, la boca, las orejas...el seguir caminando es inútil...es una guerra perdida, yo se que no hay nada detrás de mi cuarto ni de mis ojos. Yo se que no hay nada...ni siquiera el teatro, ni un bosque ni una sonrisa. No quiero prender la luz...no me gusta olvidar...no voy a olvidar...es algo que tengo muy claro en mi vida, quizá sea lo único...los recuerdos son lo unico que tengo, si me los quito no vivo...pero si los tengo tampoco...no quiero fumar, ni siquiera empezar a escribir...voy a buscar un lugar vacío y blanco...pero somos como el mar...como la marea que va y viene y cambia de aguas...

peculiaridades


tengo un bamboo muy bonito que es lo primero que veo al despertar

me como las uñas

a veces tartamudeo

no me gusta ni la calabaza ni el pulpo ni la cabeza

mi casa es una oficina también

siempre me gustó un hoyo de pantalón y a veces sueño con él

todavía quiero una escalera de llantas

hace tres meses que no tomo café

suelo contar todo con sílabas

no me gusta esperar

todo es deseo

y ahí estaba el espejo
reflejándome hacia adentro de lo que soy

estoy huyendo del fuego y de las sombras
ya no tengo arbol, ni mar ni vida

me escondo detrás de la piel
veo mi propia muerte
encerrada en mis entrañas

tan ausente como un sol que nunca llega
un barco perdido
una sonrisa fingida

eres el mar de mi cuerpo,
voz convertida en eco que retumba en mis huecos

nuestros cuerpos juntos
eran poema
letras de luz
que viajaban a lo desconocido

nuestros cuerpos
eran el hambre insaciable del deseo

tu noche habitaba en mis ojos
formando un nido de estrellas infinitas

me había resistido a crecer.duele.las palabras se me atoran.el abecedario no me alcanza.quiero sudar más calorías. me enredo en mí mismo.se hacen hoyos en mi cuerpo.mi vida es un árbol.quiero el libro nuevo de ruy sánchez.quiero actuar en una obra de teatro.bailar en una megapista. ir a un mar de agua caliente.

tantos años para llegar aquí
y resignarme en el recuerdo

Me aventé a las olas de tu mirada
a la marea de tu cuerpo
hoy me he tragado la sal
y la soledad arde en mis manos

fuimos la espuma y la noche
esa arena que escondía nuestros sueños
recuerda el horizonte
nuestros pies frente a la inmensidad
cuando el sol se perdía en un parpadeo

tengo en mi boca el nudo de tus deseos
arrebátamelos, quiero quedarme sin voz y sin cuerpo
tu aliento se pierde en el aire
es un susurro, que rompe en mis paredes

siempre serás la luz de mis ojos
el abrazo que me rescata de los abismos
estoy viendo cómo el mar se rompe en mi vida
la sal de mi piel guarda tu recuerdo

me perdí buscando el atardecer de tus ojos,
recorriendo mares olvidados
vagando sin nombre en la oscuridad
y en tus huecos


mi cuerpo es un naufragio,
oceano sin límite
que derrama sus silencios
para convertirse en desierto

soy una huella perdida, buscando en tus manos el mapa y la respuesta
escondido en tus palabras y en tu cara inmovil

tú ya no puedes escucharme
eres parte del mar que despedimos
y que alguna vez penetraremos


regresame a ese lugar donde el tiempo era el pretexto
donde alguna vez dije tu nombre y me hice gigante
trágate mi vida
húndeme contigo en el recuerdo
mi corazón será una ola
aprisionada en tu cuerpo

pronto seremos río
y no sabremos desembocar
o seremos pájaros ciegos
volando en otro mar

en mi mirada
se esconde un pájaro

vuela en la oscuridad de mis ojos

cuando la marea sube
no queda más
sólo ceder

toda la culpa es mía
dijo
tirándo su mirada al vacío
visualizando su muerte
a través de la ventana

mis manos son bocas
que besan el cielo
y traspasan el pasto
olvidando

el amor después de todo
es una telaraña
frágil
abandonada

hay arañas picando mi cuello
me atrapan la voz
buscan su canto en mi ombligo
algún nido tan grande como sus deseos

quisiera tragarme la sal de este mar
huir del recuerdo y lo que queda de mí

soy un hilo que se anuda en la garganta
una serpiente sin lengua
debajo de tu cama

ese niño en la foto
guarda una sonrisa en las manos
quizá soy yo sin remedio

este camino es largo
y no quiero regresar
mi única maleta es mi sombra

hay un perro mordiendome la pierna
tan lleno de rabia y veneno

en este viaje voy solo
y solo me quiero quedar

al abrir los ojos, se que seguirás aquí
contándome chistes o cuentos
no me puedo resignar
este dolor es más grande que yo

el destino te trajo a mi de una manera sorprendente
y así nos vamos

me llevó de ti lo mejor
fue hermoso
era como ver a un niño crecer

guardo en mi corazón
nuestras risas y nuestros silencios
nuestro baile

voy a extrañarte
no me voy a olvidar de ti
nunca

hoy hablé con mi mamá
y tienes razón...
mi familia siempre estará conmigo

te amo
con todo lo que eso implica

esa noche es mía
me la tragué en una despedida