viernes, diciembre 05, 2003

Columpio.

Columpió mi secuestro, se estampo en el... mató a un gusano después, arrepentida vomito en mi cuerpo. Quiso ser feliz pero ya lo era, se revolcó en mi cerebro, hasta lograr inflarlo. Me lamió la infancia y con sus dedos sudados me desapareció. Acecho mi cuerpo y voló en mi noche hundiéndose en ella, inventándole estrellas y embriagando mi aire. Columpio mi secuestro de nuevo dos veces seguidas, entre piedras, admiraba el techo azul. De la nada yo la perseguí y fui victima de sus escurrimientos, después yo habría de abrirme al sol, secarme a tientas para sobrevivir de ella... finalmente lleve a mi pensamiento el gusano muerto de su conciencia mientras admiraba el nacimiento de un nuevo columpio capaz de resistirme y así no caer repentinamente por sus vacíos. Ella escapo y yo, sigo columpiándome, esperando su regreso.