me encontré este texto en una caja abandonada de mi cuarto, y casi tiene la misma fecha que hoy:
esta vez esperaré
con los ojos tejidos al cielo
me quedaré en el sitio que me dejaste
suspendido en tus manos
avorazándome de preguntas
esperaré las veces que no quiera
y tus manos distantes me darán un nuevo antojo
esperaré con las venas obstruidas
el cuerpo amarrado al piso
amarrado al silencio
inventaré un horizonte
te daré el nudo
y el hasta pronto