mi cuerpo es arena sin mar
un abismo perdido en las líneas de tu mano
soy un silencio en el pecho
un nudo sin principio
una luz de bengala a punto de morir
detrás de tus ojos
hay desierto y sed
una escalera infinita a lo desconocido
una palabra, una gota de agua.
vierte sobre mi todas las caricias
los ecos apagados de tu cuerpo
los recuerdos que alguna vez tiraste por la ventana.
voy a tirarme del cielo más alto
iniciaré el laberinto
este destino sin sabor ni culpas
esta es la ultima palabra
cae de mi boca y se derrama
en lo más seco de tu piel.