domingo, enero 20, 2008

Me aventé a las olas de tu mirada
a la marea de tu cuerpo
hoy me he tragado la sal
y la soledad arde en mis manos

fuimos la espuma y la noche
esa arena que escondía nuestros sueños
recuerda el horizonte
nuestros pies frente a la inmensidad
cuando el sol se perdía en un parpadeo

tengo en mi boca el nudo de tus deseos
arrebátamelos, quiero quedarme sin voz y sin cuerpo
tu aliento se pierde en el aire
es un susurro, que rompe en mis paredes

siempre serás la luz de mis ojos
el abrazo que me rescata de los abismos
estoy viendo cómo el mar se rompe en mi vida
la sal de mi piel guarda tu recuerdo

me perdí buscando el atardecer de tus ojos,
recorriendo mares olvidados
vagando sin nombre en la oscuridad
y en tus huecos


mi cuerpo es un naufragio,
oceano sin límite
que derrama sus silencios
para convertirse en desierto

soy una huella perdida, buscando en tus manos el mapa y la respuesta
escondido en tus palabras y en tu cara inmovil

tú ya no puedes escucharme
eres parte del mar que despedimos
y que alguna vez penetraremos


regresame a ese lugar donde el tiempo era el pretexto
donde alguna vez dije tu nombre y me hice gigante
trágate mi vida
húndeme contigo en el recuerdo
mi corazón será una ola
aprisionada en tu cuerpo

pronto seremos río
y no sabremos desembocar
o seremos pájaros ciegos
volando en otro mar