en silencio
para luego tener cosas que decir
por lo pronto, toque de queda
un taipe en mi boca
hacer lo que tengo que hacer en el tiempo que lo tengo que hacer
esperar
un cielo despejado y grande
a la medida de mi mirada
despedirme con las manos muertas e infertiles
acaloradas y quemadas
adquirir nuevos miedos
por pura pendejez y querer darme en la madre
sin ningun esfuerzo
disfrutar de mis días libres
tratar de llevarmela calmado
seguir enfrentando nuestro silencio
interpretarlo...
y lo interpreto como...
ya ni modo,
que ridiculo...
el sábado mi casa sola, ruidos extraños
tu ausencia era predecible,
ni creas que no
en menos de poco tiempo, te has hecho invisible
y se me quitaron las ganas de llenar este vacío
se me quitarón las ganas de pensarte
se me quita
se me qu
me quité las ganas de hablarte debajo de las cobijas
de nombrar cosas mías con tu nombre
lo bueno que estoy en toque de queda...
pero no le sigo, porque tengo sueño