martes, septiembre 21, 2004

supuse que quería dormir
traía los ojos muy cansados pero no era para tanto
nos metimos y había cochinero...como el mío en mi cuarto.
supuse que eras comestible
¿quién empezó a morder?
tres mordidas en mi brazo y no se cuantas en tu espalda.
no podía irme sin saber como era lo tuyo contra lo mio
...preparé la huída, me acorde como escapaba de la casa de mi abuelito...ese: "ya me voy" contenido en la garganta, haciendome sudar.
habité en tu boca...el cuello era el paraje perfecto para hacerte reir
...las mordidas dejaron de arder y probe poco a poco hasta apagarme...listo para incendiarme otra vez...
...me gusta la botella, le meti semillas de manzana...les encontre lugar.
... eso pasó despues de caminar por el mismo camino hacía la parada de los taxis con el sol atacante y picante, soportar llamadas perdidas anonimas, soportar el hambre y la sed y esperar los altos...ser un excelente transeúnte, sin que me piten a media calle...
y al despedirme quise saber las veces que he cerrado los ojos pensando en poros, pensando en mis calzones mojados...
...traigo las piernas temblorosas y los pies un poco hartos de correr a prisa...al ra.