jueves, septiembre 02, 2004

te creí por mi vicio de sostener
la mirada y el cuerpo
fui un disparo al aire
una abreviatura, una causa invisible.
te creí porque el abismo de tus piernas
dejaron de arrastrarse y mi cintura fue la muleta.

de piedra el deseo
todo mi mar sin tu espuma
la ceguera y la despedida
un oleaje precipitado. de piedra.
las voces un eco susurrando al olvido
el encanto revuelto,arrastrado...
tu aguja tejiendo carencias
...yo destazando mis telas y la cobija que hice para ti...

el final sigue siendo
una hoja blanca arrugada
...y te lami la mugre pero fue tanta que se me hizo costumbre sacar la lengua en los puentes de entrepierna...
una hoja sin gravedad flotando
una trampa para creer que todo fue verdadero...
una llave ideal para cerrar con candado tu puerta de entrada por salida
una fe que no sea desechable y que se deje nutrir
lo dulce y lo amargo se chorrean y navegan por las venas
o0.
y ya el entierro no sirve de nada...que pena...
...cuanto pesame tan ridiculo...tanto silencio y distancia ahogados en la garganta, tanto no querer que en el tropiezo ya no hay piso ni verguenza...tanto de lo mismo...un hoyo del mismo tamaño pero con diferente precipicio...fondo.