dedicado para ti, que ya decidiste irte con las manos vacias...
Encargo
por Julio Cortázar
No me des tregua, no me perdones nunca.
Hostígame en la sangre, que cada cosa cruel sea tú que
[vuelves.
!No me dejes dormir, no me des paz!
Entonces ganaré mi reino,
naceré lentamente.
No me pierdas como una música facil, no seas caricia ni
[guante.
tállame como un sílex, desespérame.
Guarda tu amor humano, tu sonrisa, tu pelo. Dalos.
Ven a mí con tu cólera seca de fósforo y escamas.
Grita. Vomítame arena en la boca, rómpeme las fauces.
No me importa ignorarte en pleno día,
saber que juegas cara al sol y al hombre.
Compártelo.
Yo te pido la cruel ceremonia del tajo,
lo que nadie te pide: las espinas
hasta el hueso. Arráncame esta cara infame, oblígame a gritar al fin mi verdadero nombre.