equilibrandome en la orilla de una barda
imaginandome el barranco, mi cuerpo rodando y envuelto de plantas.
invocando tu espalda de hielo para dejar de derretirme en la misma parada de taxi.
...parezco un estornudo, un gargajo...
todavía no me acostumbro a caminar erguido, a dejar de rascarme la espalda, evitar el hipo o el bostezo...a ratos soy mas que un paso o un hotel de paso...a veces si soy casa, si soy cobija, si soy un sello de garantía o un anillo de compromiso.